Un paciente llega a clase de Pilates. Viene con el propósito de recuperar movilidad pues su columna está realmente muy machacada.
Nada más ponerse frente al espejo. Ay espejito espejito mágico. Mira Marta, QUÉ HORROR.Mira qué barriga, qué chepa, y estas piernitas, con lo que yo era..
Y así, comenzamos una retahíla de todas las cosas que no están en el sitio donde deberían estar, o en la forma, o en el peso, o consistencia… parece estar en la pescadería examinando si es fresco o no el lenguado.
Siguiente paciente. Ya viene con camisetas anchas, normalmente disculpándose por las pintas con las que viene.
– Qué desastre, vengo así de mal, … es que iba a coger otra ropa, pero al final, ya sabes, no voy de compras. Porque me horroriza verme. ¿Puedo hacer la clase hoy con los ojos cerrados?
Un paciente tras otro colocándose frente al espejo y devolviéndose un montón de insultos. No se reducen a hablar sobre que no me gustan mis muslos. Si no, fíjate qué asco doy, que pena, a dónde voy así.
¿Qué pasa cuándo nos vemos frente al espejo?. ¿Y que remedios podemos buscar para que nuestra imagen deje de ser una tortura?.
- SOMOS EXPERTOS EN DETECTAR LO QUE VA MAL O NO NOS GUSTA.
Ver lo que está mal es adapatativo. En muchos momento nuestro cerebro nos ha hecho sobrevivir gracias a este mecanismo. Nos ha hecho avanzar para buscar algo mejor. Nos ha librado de algo «incorrecto». Nos ha dicho que falta algo que debería haber.
Pero este entrenamiento en “ no está todo, o no está todo todo lo bien que podría estar..” es un ciclo infernal en cuanto al cuerpo se refiere.
El espejo hace que se detecte ese grano, ese pelo, esa lorza, y se interprete como… hay algo que falla. No eres lo deseable. Eres Adidos.
REMEDIO: Enumera y AGRADECE lo que si está, y lo que si está bien (aunque no sea perfecto) Gracias cuerpo por permitirme caminar, por dejarme ver a mis seres queridos, que bien que siento la brisa del mar, que suerte poder oler (a veces)
2. SOMOS SERES QUE IMAGINAN POR ENCIMA DE SUS POSIBLIDADES.
El cerebro va a tender a comparar lo que ve, con el ideal de lo que le gustaría ver. Es como una suegra, para tener razón va a hacer lo que sea. Distorsiona, manipula, crea recuerdos engañosos de lo bueno que estabas ese verano del 92 en las vacaciones de Orilla Mar.
REMEDIO: DISTANCIATE DE TUS PENSAMIENTOS
Tu mente no eres tú: lo veíamos cuando practicábamos mindfullnes. Los pensamientos son sólo pensamientos y no la ABSOLUTA realidad. De la misma forma que puede venir un loco por la calle y decirte que eres un espárrago fluorescente y malparido. No todo lo que te dice tu mente es válido, ni útil, ni cierto. No todos tus recuerdos son verdaderos, ni útiles. No todo lo que te imaginas sería tan maravilloso de ser verdad.
..qué bien cuando tenga los abdominales de Cristiano… ok, tengo una buena noticia y es que ha desmentido hacer 3000 abdominales diarios. Ronaldo nos dice «Hago 200 o 300 abdominales cuatro o cinco veces por semana. No es bueno hacer demasiados porque puede provocar problemas de lumbalgia»… Ya nos queda menos entonces.
2. LA MENTE SE CREE JUEZ Y SENTENCIA DE MANERA ABSOLUTA.
Cuando vemos lo malo pensamos en modo todo o nada. ¿Cómo discriminamos que estamos juzgándonos?
Los pensamientos son:
Absolutos: Estas más fea. Así, todo. No es que me sienta mejor otro color. No, estas fea y punto.
Exigentes: Debería bajar 10 kilos, ya.
Fantasiosos: cuando consiga bajar esta barriga me sentiré mejor en todos los ámbitos de mi vida.
Moralistas y destructivos: esto es porque no eres una persona suficientemente disciplinada, no tienes fortaleza.
La réplica que me suelen hacer entonces los pacientes es, si dejo de decirme eso entonces si que no voy a mejorar. O ¿qué pasa si no me lo digo y resulta que es verdad?
Imaginemos que estás en lo cierto, que eres fe@, que deberías bajar 10 kilos y que no tienes disciplina. Bueno, repetirte esta historia, hasta ahora no te ayudó. Repetirla cada vez que te miras al espejo no sé como puede ayudarte esta vez.
No es cuestión de buscar que sean más o menos ciertos tus juicios, si no que nos hablemos de una forma útil, compasiva, y enfocada hacia la búsqueda de soluciones.
REMEDIO: cuestionarse si esto es absolutamente verdad. Si es 100 por 100 así, y si tengo pruebas. Hay que buscar el fallo en la lógica de ese pensamiento.
¿Debería bajar 10 kilos para estar feliz? ¿Es absolutamente verdad? ¿Hay gente feliz que pesa lo mismo o más que yo?
¿Cualquier persona que no es capaz de tener unas piernas delgadas demuestra falta de fortaleza y de disciplina? ¿Conozco al menos a una persona que tenga muslos rollizos y haya sido una persona capaz?
O es que tooooooodas las personas con muslos delgados son unos fenómenos consiguiendo cada uno de sus objetivos en la vida.
3. LA ATENCIÓN + PENSAMIENTOS NEGATIVOS SOBRE UNA ZONA CORPORAL DISTORSIONAN LAS SENSACIONES QUE RECIBO.
Las zonas en las que me centro me parecen más grandes, torpes, pesadas y descoordinadas.
Como si un ciempiés tuviera que pensar en que pie mover antes que el otro para caminar.
REMEDIO. ATIENDE A TU CUERPO, CENTRA LA ATENCIÓN EN PEQUEÑOS RETOS.
Intenta moverte sin juzgar, y marca en la sesión pequeños juegos. Voy a hacer este ejercicio apoyando menos veces la mano en la pared. O voy a contar mentalmente hasta 10 para bajar la pesa más lenta.
Durante los ejercicios ve explorando tu cuerpo como si fueras un alienígena que acaba de transformarse en humano. Cierra los ojos, intenta percibir tu espalda, la respiración. Que la forma que te devuelve el espejo no sean el único instrumento que le das a a tu cerebro para construir tu esquema corporal. Si no va a seguir escuchando ese eco de … miiiiira, mira que barriga, y ahí estarás sin hacer realmente lo que te están mandando en clase.
Hay que marcarse micro metas dentro de cada ejercicio, y pequeñas metas dentro de cada sesión.
Atender a tu cuerpo y movimiento pasa también por buscar ropa adecuada para la actividad. Hacer ejercicio con ropa que nos queda apretada o grande y que es incómoda para el ejercicio altera las sensaciones que los movimientos nos pueden aportar.
CUERPO PARA QUÉ TE QUIERO.
PRIMER EJERCICIO. PREGUNTAS EN LUGAR DE CRÍTICAS.
¿Qué voy a hacer tan diferente? Y si esto es lo que me va a dar seguridad… ¿para qué quiero esa seguridad? ¿qué vida no estoy viviendo porque mis brazos no son suficientemente tersos?
¿Qué cosas van a cambiar en tu vida cuando logres verte mejor en el espejo?
¿Cómo vas a empezar a actuar?
¿Qué ropa te vas a poner?
¿Qué es lo que peor que pasaría si dejases de criticarte?
SEGUNDO EJERCICIO. MEJOR AUTOCONOCIMIENTO = BUENA AUTOESTIMA.
Haz una lista sobre las cualidades que te definen, y que te hacen ser quien eres. Si no eres capaz, haz una lista sobre las cosas que crees que son importantes y te gustan en tus amigos, pareja o hijos.
1º mis nalgas de acero
2º mi capacidad de escucha
3º mi entusiasmo
CUARTO EJERCICIO. BUSCA EL VALOR DE ESE CAMBIO.
Elige algo de tu aspecto en lo que puedes trabajar, y ve marcandote metas pequeñas y realistas.
Vincula ese cambio corporal a algo que realmente quieras tener en tu vida: sentirme más ágil, que mi pareja me encuentre más atractivo, poder hacer mejor las clases de pilates…
Quiero bajar 1 kilo este mes para volver a ponerme este vestido que me gusta tanto.
Quiero tener un abdomen más fuerte para rematar mejor en los partidos de Padel.
Tu meta no será son un culo redondo y perfecto flotando en la galaxia, tu meta seguramente tenga más relación con sentirte bien en tu cuerpo y disfrutarlo.
Espejito espejito mágico, no seremos los más guapos del reino, pero estamos aprendiendo a vivir con menos complejos.
Marta Carneiro Pazo
Psicóloga, Fisioterapeuta, defensora del uso responsable del espejo.
A través de un espejo uno puede aprende a mirar, pero no siempre se aprende ver.